Ayer, cuando llegamos a la escuela, Elenara y yo tuvimos una sorpresa, había delante de la escuela un coche que no era raro para nosotras. Sí, lo de Profa. Valesca. De pronto me puse a temblar y me faltaba el aire por el estado de nervios. No sé lo que debo hacer, hace medio año que convivo con Profa. Valesca en la Práctica, nos ayuda muchísimo y no hace nada para quedarnos nerviosas, pero aún no conseguí superar esa inseguridad, que es de mi interior, no tiene nada a ver con nadie. Incluso, Profa. Valesca me dijo una cosa verdadera que todas las personas que me conocen dicen lo mismo, yo tengo pensamientos negativos, o sea, yo no creo en mis capacidades y por eso sufro muchísimo por anticipación. Empiezo a darme cuenta que tengo que cambiar, pues será bueno para varios aspectos de mi vida, principalmente porque seré una futura profesora y no puedo pasar ese tipo de sentimiento a mis alumnos, sino probablemente eso les pueda interrumpir la seguridad y creencia en sus capacidades.
Pero, hoy no me voy a hablar solamente de cosas malas porque dos hechos de dejaron muy contenta ayer. El primero fue que cuando llegamos a la escuela, de pronto una profesora nos llamo y dio un pedacito de torta, le pregunté lo que había pasado, ella me respondió que el día anterior había la conmemoración del día de la supervisora y Profa. Varlene, la directora, les pidió para guardar una parte a nosotras. Dicen que actos valen más que palabras, realmente para mí eso fue un estímulo en mi futura carrera. No solamente por el dulce, pero por el recuerdo de ellas relativo a nosotras practicantes. Cada día tengo más ganas de volver a la escuela, porque es tan agradable y todos intentan de una manera u otra nos ayudar. Como ya dije esa es la mejor práctica que hice hasta hoy.
El otro hecho fue las palabras de Profa. Valesca en relación a mi actuación de la noche. Ella dijo que relativamente a mi actuación no tenía nada a decir, que la clase fue dinámica, o sea, interaccioné con los alumnos. Claro, que aún no conseguí me desapegar de los problemas lingüísticos (que tengo innumerables), pero la dinámica estaba buena. El momento que ella dijo, yo estaba tan nerviosa que no me di cuento de lo que decía, Elenara es que me ayudo a pensar. Percibo, desde la Práctica I, que las palabras de Profa. Valesca tienen el poder de beneficiar mi trabajo. Es eso que intento hacer con mis alumnos, cuando percibo el interés de ellos, uso una palabrita de incentivo y luego ellos se esfuerzan para hacer lo mejor. Me parece muy positivo para el alumno, en general, desde la enseñanza fundamental hasta el superior. Eso no es común de ocurrir conmigo, principalmente cuando se trata del Español que tengo muchísimos problemas lingüísticos, pero lo que hace Profa. Valesca de identificar algunos puntos fuertes en mi trabajo es importantísimo para mi futura profesión y para me poner a intentar ser cada vez mejor.
Para finalizar quiero volver a un asunto que abordé en alguna de las reflexiones pasadas, de mis pre concepciones. Cuando llegué a mi grupo percibí que mi mejor alumno (que interacciona con nativos del Español), hasta entonces, no estaba presente, de pronto pensé, justamente hoy que Profa. Valesca está acá. Normalmente es él que contribuye con mis clases y ayuda a los compañeros a pensar y comprender. Pues quien debe llevar el alumno al raciocinio es la profesora pero se tiene un alumno con el pensamiento más ligero estimula todo el grupo. Entonces creí que mi clase estaba perdida. Pero, con el desarrollar de ella percibí que uno de los alumnos nuevos se sobresalió de los demás, o sea, participó y contribuyó intensamente con las propuestas. Así pude identificar que tengo más alumnos que ayudará el grupo, pero mi creencia solo cambio cuando la comprobé. Pienso que las pre concepciones pueden interferir en las clases y me impedir de conocer las capacidades de los demás.
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