Reflexión del día 31/05

Ayer, por la noche, Elenara y yo llegamos a la escuela, con la gracia de Dios, por que no tenemos transporte para Bagé durante la paralización.  Entonces paramos allá con un taxi. Pesar de toda la dificultad, después del final, que espero que sea breve, tendremos  muchas historias para contar.

Luego que  entré en la escuela, encontré la profesora de Portugués, la que estaba faltando, en las semanas anteriores, y me cedían sus clases. Para mi sorpresa, yo le dije que tenía aprovechado sus faltas para regularizar en desarrollo de los contenidos y ella me ofreció otra de sus clases, porque ya estaba adelantada en sus contenidos. De pronto me puse contenta porque, nuevamente, pude impartir dos clases en mi grupo.  Lo que me ayuda muchísimo, porque el ritmo del grupo es un poco lento y los feriados, por suerte, caen el jueves. Yo agradezco  a Dios, por hacer mi práctica en la Peri, ellos ofrecen a mí, cosas que ninguna escuela de mi ciudad ofreció, pesar de ser bien acogida por todas.

La clase estaba muy buena, tuvo la participación espontanea de todos, o sea, cada uno in tentaba adivinar lo que yo preguntaba o iba a decir. Todo eso  entre sonrisas, cambio de ideas, la clase estaba muy divertida, distinta de la pasada.  Pero una cosa percibí, mientras conducía las actividades, el chico que me refiero que presenta algún problema mental, todo que le solicito él lleva mucho tiempo para asimilar lo que digo, la lentitud es  mental, porque cuando él raciocina cumple la tarea, pero con dificultad. Hasta para leer una frase o cuestión, el alumno necesita de, más o menos, dos minutos para después soltar la voz. Me parece que tiene algún problema de falta de atención y concentración. Cuando le pedí, para hacer como los otros, mirar la tirita y luego contestar  la cuestión, primero leyó solito para después pronunciar las palabras, a la hora de contestar, respondió a su gana, no miró la hoja, con la ayuda de los demás concluyó la actividad. Ya pensé en preparar otras actividades para él, pero pienso que son solamente cuatro alumnos que siempre comparecen a la clase, y hicimos las actividades colectivamente, además de exponer su problema a los demás, que puede generar el constreñimiento del alumno, yo perdería mucho tiempo explicando una actividad para él. A mí no me parece positivo hacer eso, pero verdaderamente, no sé.

Durante la clase ayer, me acordé del habla de Jéssica cuando me dice que yo necesito crear una relación de amistad con los alumnos. Mientras yo escribía en el pizarrón, yo escuché una baja charlita de ellos, era sobre las pruebas finales. Y les pregunté se iban bien o mal en las demás asignaturas y la charla se extendió, hasta que una alumna me dijo que ellos tenían hecho una “colada” durante el examen y la profesora no percibió. Cuando ellos compartieron eso  conmigo, no me sentí una simple practicante pero una amiga. Me pareció una demostración de confianza, pues yo podía contar a la profesora la verdad, y obviamente no lo hice. Además , sin querer, me alertaron que yo necesito estar con los dos ojos abiertos durante el examen que aplicaré. Cuando terminaron el conto, les dije que no sirve de nada hacer la colada para avanzar la totalidad o sacar buenas notas, lo mejor es estudiar y mostrar lo que sabe. Claro que ya fuimos jóvenes y con tantos otros asuntos para se preocupar,  los estudios tienen poca importancia, es decir, sabemos como es. Pero, no les dije eso porque de una manera o otra yo iba les desestimular  cuanto a los estudios.  

Crear los lazos de amistad con mis alumnos y demás profesoras de la escuela es lo que más importante que viví hasta hoy en las prácticas, más joven o con menos experiencia yo no daba la importancia que eso merecía, me importaba solamente con el desarrollo del trabajo sin percibir que trataba con personas y no con máquinas. Hasta porque siempre me acuerdo, de la niñez, de los momentos que pasé con profesoras que eran nuestras amigas y no de las que enseñaban bien y nunca proporcionaban momentos agradables de charlas, elogios por algún buen trabajo, entre otras cosas.